En el modo en el que tratas la comida puede determinar mucho sobre ti. Alimentarse está vinculado desde los primeros compases de la vida, incluyendo la etapa de la gestación, a la construcción de las emociones. Casi todos los conflictos de tu vida interna tienen un reflejo en el modo en el que tratas a la comida y cómo te alimentas. Sí existe alguna crisis (estrés) interna, con frecuencia se intenta cubrir esa crisis con excesos o carencias de alimentos.
“Si la vida no te parece deliciosa, no habrá comida que te alcance”
Si no satisfaces el hambre, el cuerpo desfallece (muere), si no puedes Amar – te, el deseo de existir se desvanece y entras en un bucle de tristeza, miedos, etc. La comida es una necesidad biológica, el Amor entra dentro del ámbito de los deseos que precisas para sentir plenitud en tu vida y sentirte bien contigo mismo y tu entorno, más el problema con la comida puede aparecer cuando inviertes el orden anteriormente citado. Por ejemplo, cuando empiezas a dejar de cuidarte para desviar ese cuidado hacia tu pareja, tus hijos, etc. Es en ese momento cuando tu frigo se convierte en tu mejor amigo y confidente para cubrir esa dejadez.
Las personas con conflictos en la alimentación buscan esta vía para expresar emociones sin expresar en su momento y que aún siguen dentro, en el subconsciente o el inconsciente, siendo así irreconocibles hasta la hora de que tomes consciencia sobre ellas.
Ahora te pregunto, ¿haces dieta o es una manera de auto – castigarte?
La realización de distintas dietas alimentarias puede estar al servicio de una necesidad de auto – castigo, más que de una idea de mejorar la salud. Como antes te comentaba, la obesidad puede representar el amor a otro (otra) y una forma de desamor hacia uno mismo (misma), enmascarando una relación patológica con alguien. Por otro lado, la negación a la comida puede ser una forma de autoafirmación o de expresar que la vida no tiene sentido si falta el alimento afectivo.
Ingerir alimentos de forma compulsiva y desenfrenada solo intenta aliviar la angustia.
Diversas emociones (rabia, miedo, ira, culpa, etc.) intentan expresarse por medio de la comida. Cuando callas tus emociones, aquello que sientes, tragas para aliviar esa tensión creada por ese silencio. Las luchas internas se silencian a menudo con llenarte la boca con comida para no pronunciar aquellas palabras con una carga emocional que puede asustarte, palabras referidas a cosas que no nos permitimos sentir.
“Lo psicológico y lo somático están en continua relación”
En relación con la alimentación, en ocasiones comes cuando no te apetece. La voluntad y la razón se agotan entren atracones que no podemos dominar. Es tú mente inconsciente que te impulsa a tal comportamiento. Lo bueno de esto, es que si has creado este hábito con el paso de tiempo, también puedes crear uno diferente para vivir de la manera que a ti te gusta.