Te presento a una amiga, se llama «culpa».
Feliz vida a todos y todas, Hoy sin muchos preámbulos, te voy a presentar a una vieja amiga, que si mal no creo, todos la hemos sentido o, quizás la estés sintiendo justo en este momento. Te presento a la emoción de la “Culpa”, que viene a entregarte una carta. ¿Te apetece leerla? Te prometo…